Soy Ingeniero Técnico Industrial de profesión, colegiado Nº 4023, y aunque continuo ejerciendo el desarrollo de la misma, puedo decir que no es mi negocio. Mi negocio es la consultoría TIC, pero quiero dedicar este post a la importante labor que viene ejerciendo mi colegio profesional, y a defender y solicitar el apoyo de mis compañeros de profesión para que el colegio, constituya el nexo de unión entre nosotros y la palanca que nos impulse hacia un futuro más cierto y prometedor.

Hace unos años, cuando se visaban proyectos a mansalva, el colegio ejerció una importante labor de control de la calidad de los trabajos que salían a la calle. El resultado creo que salta a la vista. Como gerente de una empresa de consultoría, dónde manejamos una magnitud elevada de datos estadísticos, reto a que alguien me diga el número de reclamaciones y quejas a promotoras y constructoras por defectos en la construcción, y por defectos en las instalaciones. Me atrevo a decir que habrá una diferencia considerable entre ambos números, sin mirar ningún documento.

Por otra parte, en aquel tiempo, el importe de los visados que se pagaba por dichos proyectos no suponían una carga para el técnico y sin embargo en la actualidad con la disminución del trabajo existente, entre el seguro, visados, tasas y demás, parece que constituye una carga insoportable. Y por si fuera poco, la ley nos apoya para que saquemos proyectos a la calle sin visar. He escuchado tanto los argumentos de los compañeros que están a favor, cómo los que están en contra, y desde la perspectiva que me da estar en un negocio como la consultoría TIC, hago la siguiente reflexión…. Trato todos los días con profesionales informáticos. Dicho colectivo tienen unos problemas de intrusimos feroz, que provoca entre otras cosas que existan una bajada de precios en los honorarios con los que las empresas no p0demos competir. Otros factores, como la calidad de los trabajos, el servcio, y la labor de consultoría, dejan de tener importancia para el consumidor final. “Nos estamos matando nosotros mismos”.

Si queremos que nuestro colectivo, el de los Ingenieros Técnicos Industriales termine así, con precios por los suelos, con clientes descontentos, y en definitiva con el desprestigio de nuestra profesión, solo tenemos que acabar con nuestro colegio profesional. Si hay un momento en el tiempo, por el que los peritos (Se aplica a la persona que tiene experiencia, práctica o habilidad en determinada ciencia o arte), debemos permanecer unidos, sumar, aportar ideas a nuestro colegio, a servirnos de él para lanzarnos al futuro con garantías, a proyectar nuestros servicios a otros países, a internacionalizarnos, a utilizar las nuevas tecnologías, a seguir formándonos, a defender nuestras atribuciones y a mantener la importante labor que ejercemos en la sociedad …….ya sabemos lo que tenemos que hacer.

Un abrazo a todos.